SÍNDROME DE OVARIO POLIQUÍSTICO (SOP)

Hay un tema cada vez más recurrente entre las mujeres en la consulta de nutrición, “tengo ovarios poliquísticos…” La obesidad está vinculada al SOP, pero la pérdida de peso no es precisamente la principal motivación a la hora de venir a consulta, y es que el SOP y la infertilidad van de la mano.  Peeeero, el tratamiento a nivel nutricional de esa obesidad puede mejorar la fertilidad de la mujer con SOP, antes de meternos en el tratamiento nutricional, vamos a conocer un poco más qué es el SOP.

¿Qué es el SOP?

El Síndrome de ovario poliquístico (SOP) es un trastorno endocrino que provoca unos determinados síntomas y signos en las mujeres que lo sufren.

Se desconoce cuáles son las causas que lo produce, si bien parece guardar relación con factores genéticos como el aumento de los niveles de hormonas masculinas (andrógenos), la resistencia a la insulina, y otros aspectos de tipo medioambiental.

☝️ Dato a tener en cuenta: entre el 1% y el 5% de las mujeres en edad de reproducir padecen el SOP.

Como comentábamos, existen una serie de síntomas que se relacionan con el SOP ¿Cuáles son?

  • A nivel de una ecografía se observan muchos quistes pequeños en los ovarios, que en realidad son folículos (estructuras en las cuales los óvulos maduran).
  • Hiperandrogenismo, se caracteriza por un exceso de vello en el rostro, pecho, abdomen y los muslos, y por acné severo o acné tras la adolescencia que no se puede tratar con los tratamientos que se suelen aplicar en estos casos. En concreto presentan este síntoma más del 70% de las mujeres que padecen el SOP.
  • Alteraciones en la menstruación. Entre las más habituales se encuentran la ausencia de esta durante algunos periodos, razón por la cual el SOP puede derivar en infertilidad.
  • Mayor resistencia a la insulina (objetivada como incremento de la glucosa en la sangre), que a nivel clínico se refleja en obesidad o acantosis nigrans (partes de la piel se vuelven aterciopeladas, oscurecidas y engrosadas).

¿Cómo se diagnostica el SOP?

Existen 3 criterios diagnósticos (Criterios de Rotterdam, 2003), de los cuales se deben cumplir 2 de ellos:

  • Oligo o anoavulación. Alteraciones menstruales, que pueden ser retrasos o periodos sin menstruación.
  • Hiperandrogenismo, que se observa a través de una analítica hormonal y del perfil lipídico y glucémico.
  • Ovarios poliquísticos. Se estudia a través de una ecografía ginecológica.

Ya sabemos cuáles son los síntomas y cómo se diagnostica, pero nos falta algo más, ¿cuáles son los riesgos asociados a padecer SOP?

  • Aumento del riesgo de padecer diabetes mellitus tipo 2 y enfermedades cardiovasculares (como síndrome metabólico e hipertensión), debido a la resistencia a la insulina.
  • Afecta a todas las partes del cuerpo, y no solo al sistema reproductivo.
  • Hay más posibilidades de sufrir hiperplasia endometrial (es decir, un engrosamiento excesivo del endometrio), lo cual se relaciona con el incremento del riesgo de padecer cáncer endometrial. Esto no es demasiado frecuente.

Y ahora sí, nos metemos de lleno en lo que podemos hacer a nivel nutricional como tratamiento para el SOP. Es cierto que hay muy pocos estudios que hablen de esto, pero sabemos que los cambios de estilo de vida deben ser considerados como primera línea de tratamiento.

✅ Con base en la evidencia actual, se recomienda una dieta hipocalórica, baja en grasa saturada y alta en fibra, con carbohidratos, predominantemente, de índice glucémico bajo.

VERDURAS. Ricas en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes; se deben incluir verduras de distintos colores, en especial aquellas de hoja verde. La patata entra en el grupo de los carbohidratos, al igual que la zanahoria, por su alto contenido de almidón.

Nutri-consejo: vegetales de todos los colores

PROTEÍNAS. Mantienen estables los niveles de glucosa y son necesarias para formar tejidos sanos, como piel, cabello y uñas.  Algunos ejemplos de proteína animal son: pescado, rico en ácidos grasos omega-3, que son antinflamatorios (consumirlo al menos dos veces por semana), huevo, pollo, cerdo y mariscos.

Nutri-consejo: ensalada con proteína vegetal y huevo

GRASAS SALUDABLES. Solemos pensar que la grasa es mala y que se debe comer lo menos posible, pero no es cierto. Hay varios tipos y se pueden dividir en buenas y malas. Ayudan a formar hormonas saludables, mejoran la función cerebral, proveen estructura a las células de cuerpo y dan la sensación de saciedad. Ejemplos de grasas buenas son: el aceite de oliva, aceite de coco, aguacate, frutos secos (almendras, avellanas, cacahuates y nueces) y semillas (de girasol y chía).

Nutri-consejo: aceite de oliva que sea virgen extra

CARBOHIDRATOS COMPLEJOS Y DE CARGA GLUCÉMICA BAJA. Su cantidad y la calidad son muy importantes en el tratamiento; elevan la glucosa en la sangre y, por lo tanto, la insulina, síntoma que presentan muchas mujeres. Se recomienda una dieta que incluya carbohidratos complejos y con una carga glucémica baja. Una pequeña porción de los siguientes alimentos es un buen ejemplo:  arroz integral, quinoa, avena, palomitas de maíz naturales, zanahoria y fruta, especialmente moras. Las porciones de alimentos a consumir dependen de las características de cada mujer, así como de su actividad física.

Nutri-consejo: gachas de avena para un aporte de carbohidratos complejos

ELIMINAR EL AZÚCAR. Es importantísimo recomendar disminuir el consumo de bebidas azucaradas (zumos y refrescos), pan dulce, pasteles, galletas, dulces, chocolates, y alimentos ultraprocesados. Las pacientes con SOP responden muy bien al tratamiento nutricional, el cual debe ser elaborado por un dietista-nutricionista. Es importante incluir un plan de entrenamiento y técnicas de manejo de estrés y salud mental para su éxito.

Esto es todo lo que os traigo sobre el SOP. Si eres una de las mujeres a las que le ha tocado sufrir esta patología y necesitas ayuda, ¡no dudes en pedírnosla!

Fuentes:

https://sego.es/mujeres/Sindrome_ovario_poliquistico

Contreras, Y. S. F. Dieta contra el síndrome del ovario poliquístico.

Kite, C., Lahart, I. M., Afzal, I., Broom, D. R., Randeva, H., Kyrou, I., & Brown, J. E. (2019). Exercise, or exercise and diet for the management of polycystic ovary syndrome: a systematic review and meta-analysis. Systematic reviews, 8(1), 51. https://doi.org/10.1186/s13643-019-0962-3

Imágenes obtenidas de Pexels, Flaticon y Unsplash

Esta web utiliza cookies propias para su correcto funcionamiento. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Ver
Privacidad